Tensa espera, es la que recorre mi cuerpo como un veneno que te va consumiendo, suavemente sin llegar a matarte pero que vas notando como va recorriendo cada centímetro de tu piel, por las venas y arterias, infectando cada parte de tu cuerpo.
Tensa espera, tanto que casi puedo cortarla como un cuchillo, puedo apretarla entre mis dedos, puedo masticarla como un chicle si quisiera y escupirla, pues esta tan presente en mi y me corroe tanto que podría exudarla por cada poro de mi cuerpo a borbotones, como lo hace el sudor estos días estivales.
Y se hace larga, eterna, como un pasillo lleno de imágenes de los relatos que han formado tu vida, y tu simplemente corres y corres tratando de llegar al final donde los cuadros aun están vacíos, esperando que sean contenedores de bellos recuerdos y de las sonrisas eternas que están por venir.
Pero aún no llegan y esa espera se hace ardiente, como las llamas de una hoguera en medio de una noche, como una luz a la que no puedes dejar de mirar, pues no hay nada mas, toda la realidad a tu alrededor se difumina y solo puedes pensar en eso, y en esos términos la espera se regodea, profundizando en esa desesperación por aquello que esperas tener.
Es una espera pesada, pegajosa, impregnada en el calor bochornoso de estos días de verano, el cual si bien es cierto que estoy inmerso en él, no lo vivo, pues mi verano es despertar a tu lado, pasear cogidos de la mano y acurrucarnos juntos en la noche.
Es una espera a tonos grises, monocromática, en el que el devenir de los días se convierte en un carrusel de momentos y situaciones que se repiten día tras día, llevándo a mi propia mente a hacerme la jugarreta de olvidar en que día vivo.. No es lunes o martes, es solo una día mas en que no puedo disfrutar de ti.
Es una espera ansiosa, pero a la par tranquila, en la cual trato de mantener mis nervios bajo el yugo de la cordura y la sensatez, sabiendo que la meta esta cada día mas cerca, aunque cuesta, y cuesta aun mas cuando ves a la persona que quieres sufrir por no poder estar a tu lado.
Es una espera dolorosa, pero por otro lado es gratificante, porque se que todo esto ha merecido la pena, para llevarme hasta donde estoy, a haber forjado un amor inquebrantable con la persona a la que quiero, y que todo esto ha servido para hacernos mas fuertes... y lo que es mas importante, se que esta espera no se volverá a repetir, ha sido un largo camino, pero es hora de tomar uno nuevo al fin... juntos.
20 Días.
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