Hace un tiempo, estaría temblando, temeroso al futuro, con miedo a seguir, a continuar, a conseguir mis objetivos por miedo a caer. Gracias a ti esos miedos han desaparecido, se han diluido como un azucarillo se deshace en una taza de café.
Porque soy vulnerable, tanto como el que mas, pero tu me haces ser fuerte, me haces continuar aunque ni yo mismo vea a veces motivos para hacerlo. Eres como un salvavidas para mantenerme a flote cuando estoy perdido en el agua. Eres como un ancla para mantener quieto cuando el viento me quiere llevar a volar.
Pero si, caigo, caigo como el que mas, choco contra una piedra, me levanto y tropiezo con mis propios cordones, fallo, pierdo y acepto derrotas con la esperanza de superarlas y ser mas fuerte. Y ahí estas tu, siempre estas tu, cuando me sienta mal para animarme, para levantarme, aunque desfallezca, estés ahí tu, para darme el aire que le falte a mis cansados pulmones, para prestarme latidos que les puedan faltar a mi desgastado corazón.
Aunque desfallezca, se que tu seras mi ángel, abrirás tus alas y me protegerás de la lluvia, y me sonreirás dandome esperanzas, incluso bajarías el sol para calentarme si tuviera frió. Gracias a ti he perdido el miedo a caer, a la derrota. En definitiva me has hecho cada día mejor.
Y lo reconozco, a veces, tantas veces no puedo evitar sentirme mal, todas tus cosas buenas las noto tan en falta cuando no estas a mi lado, pero lo compensas con tan solo una palabra, una sonrisa, una mirada, un te quiero directo desde el fondo de tu corazón que me atraviesa y me salva de nuevo.
Te quiero, y cada día intento ser mejor para ti, aunque caiga, aunque tenga miedo al camino, al futuro, a mis propios error y volverlos a cometer, se que a tu lado puedo cambiar y ser mejor persona, gracias a ti, me completas. se que a tu lado aunque desfallezca, me volverás a levantar.
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