Nadie dijo que las cosas son fáciles, casi siempre al contrario van a ser complicadas y no van a salir como nosotros queremos, aun por mucho que pensemos que nos hemos esforzado o nos hemos ilusionado con algo, existe esa posibilidad de que salga mal y tenemos que estar preparados para recibirla sin anestesia y tratar que el dolor sea el menor posible.
Tenemos
muchas opciones, podemos simplemente resignarnos y aceptar la mala
suerte, rendirnos y decir "es lo que toca" Frase que yo
digo mucho lo reconozco. Pero también podemos usarla en el sentido
de aceptar lo que nos haya tocado/pasado, pero con la mira hacia
delante, y en seguida siempre buscar una solución al problema.
Yo
soy de esos, o lo intento, si algo sale mal, en seguida ya estoy
buscándole soluciones, a veces no son mas que meras tonterías sin
sentido, pero me esfuerzo, busco y propongo, no me quedo quieto. Así
intento ser y así creo que al final, después de decir 20 tonterías,
después de probar veinte chorradas o después de intentarlo y
equivocarme 20 veces, al final me saldrá bien, esa es mi filosofía
Soy
un cabezota en ese sentido, intento serlo, aunque reconozco que a
veces me fallen las fuerzas y me desanime, me tomo un descanso y lo
vuelvo a intentar con fuerzas renovadas, casi seguramente para darme
de nuevo de bruces si, pero nunca me pondrá decir que no lo he
intentado.
Escribo
sobre esto, que parece tan obvio, porque yo soy el primero que me
costaba horrores esto, a veces me cuesta, por mi vagueza y por
aceptar las cosas como vienen, me lo digo para autorecordarmelo, es
lo que hago, mas de una vez tengo que decirme a mi mismo "nunca
te rindas, tu puedes seguir"
Tengo
que reconocer que en esta tarea también mi chica juega un papel
importante, yo le he conseguido insuflar todo ese pensamiento
positivo y es la primera que me lo recuerda, "Tu puedes con
todo, nunca te rindas" Tal y como reza una nota escrita por ella
a mano encima de mi escritorio... Eso, eso son las cosa que de verdad
importan.
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